En el recorrido por las 15 estaciones, Monseñor Domingo Díaz Martínez reflexionó sobre la sinodalidad de la Iglesia y algunos de los problemas sociales en México.
La mañana de este Viernes Santo, Monseñor Domingo Díaz Martínez encabezó nuevamente el Viacrucis presencial, luego de que en los últimos dos años se realizara a puerta cerrada en la Catedral de Tulancingo debido a la contingencia sanitaria por el Covid-19.
Asistentes participaron en el recorrido que se extendió durante tres horas por las principales calles de Tulancingo, para recordar el camino de Jesús a la cruz.
A lo largo de las 15 estaciones, el señor arzobispo de Tulancingo reflexionó sobre la sinodalidad de la Iglesia y algunos problemas sociales como la violencia, robo y la indiferencia.
Pidió evitar el abuso en los derechos del hombre y lanzó un llamado para demandar el maltrato de la mujer.
El recorrido se extendió por las calles Colegio Militar, 21 de Marzo, Calzada Hidalgo y Allende, para concluir al interior de la Catedral de Tulancingo.
Será este mismo viernes cuando Monseñor Domingo Díaz Martínez celebre los oficios de la Pasión del Señor, a las 18:00 horas. Mañana presidirá la Vigilia Pascual, a las 21:00 horas, en la Catedral de Tulancingo.
