Susana Cano, presidenta de la Federación de Escuelas Particulares de Tulancingo, solicitó la intervención de las autoridades correspondientes para evitar que presuntos maestros ofrezcan clases presenciales en lugares improvisados y con pocas o nulas medidas sanitarias para evitar contagios de Covid-19.
A este llamado se sumó Luis Fernando Garrido, vicepresidente de la Federación de Escuelas Particulares del Estado de Hidalgo, quien asistió en representación de la presidenta María del Pilar Martínez Aragón.
Ambos, en conferencia de prensa, reconocieron las adversidades derivadas de la pandemia por el nuevo coronavirus; sin embargo, la definieron como un reto y la oportunidad que tienen los colegios particulares de demostrar, que tienen los elementos y las herramientas suficientes, para sacar este ciclo escolar.
Tras señalar que han hecho esfuerzos para trabajar a distancia y desarrollar contenidos en tiempo real; urgieron a las autoridades de los tres niveles de gobierno que intervengan porque han detectado en redes sociales y en diversa publicidad, “brotes” de educación presencial que se está dando en casas de algunos maestros o maestras, incluso en algunos establecimientos comerciales que tienen un giro diferente a la educación.
“Estamos preocupados porque nosotros hemos acatado las disposiciones y la norma, para no poner en riesgo a nuestras comunidades escolares, estamos atendiendo el llamado de las autoridades de salud en todos sus niveles para llevar las clases en línea, pero estas personas que no nos consta si son maestros titulados, especializados o simplemente están aprovechando esta dinámica para ofrecerles clases en algunos lugares improvisados donde no se están marcando las figuras de sana distancia”, señalo Luis Fernando Garrido
Indicó que han detectado que hay grupos de entre cinco o 10 niños, que se reúnen a recibir “clases”, sin tener la certeza de que haya un seguimiento o exista un plan de estudios.
Subrayó que ese tipo de lugares no tiene ninguna vigilancia de la Secretaría de Educación Pública (SEP) o de Protección Civil. “Reciben a los niños desde las ocho de la mañana hasta las dos de la tarde y les dan de desayunar, están evidentemente violando el protocolo de salud pública que se ha manejado en todo el país”.
El representante de los colegios particulares lamentó que esta dinámica que ofrecen esas personas, lejos de permitir el pronto y seguro regreso a las aulas, lo están retrasando porque con un niño que llegue infectado se puede generar un brote de Covid-19.
Existe, dijo, otra modalidad donde maestras o maestros van a las casas a dar clases un par de horas al día, dos o tres veces por semana. “Están visitando varios hogares, un promedio de cinco hogares al día y si lo multiplicamos por una semana, una persona esta interactuando con 35 niños, entonces es el mismo riesgo en el tema de la salud”.
Luis Fernando Garrido reiteró el llamado a las autoridades para que actúen en beneficio de la salud pública y eviten esas prácticas que en nada ayudan a reducir esta pandemia